Es una serie de más documentales pero esto me parece lo más rescatable.
De regreso
Regresé a la ciudad y a la universidad y soy plenamente feliz. Aunque, como dije a C. hoy, me parece impresionante que cuando creo que ya soy lo más feliz que se puede ser, llega a mi vida más cúmulo de sonrisas, abrazos y buenas intenciones.
Empero, no de buenas intenciones se hace el mundo dice mi hermano V., a él respondo: sí mi buen, tienes razón. Hay que concretarse más en ser que en la teoría. Siempre he pensado que ese es justamente el problema con occidente; tenemos maravillosos filósofos con increíbles explicaciones y entendimientos y sin embargo, no llevamos la filosofía a la práctica. La ética y moral occidental se quedan en el tintero de los pensadores y muchas de las veces ni ellos mismos lo llevan a la práctica. El que sepamos que robar es malo no significa que no lo hagamos, pues lo que vivo a diario es distinto a lo que estudio en la academia, en el pensamiento y en libros.
Ahora bien S., la vida y la acción son en cada momento. Te quiero decir desde el fondo de mi corazón que no hace falta tocar fondo para salir adelante, que no es necesario sentir la fuerza completa del movimiento para mutar, nosotros no somos nada más que continuo movimiento y mutación (reiterando). No busques la felicidad etérea que nos presenta el futuro incierto que nos llena con posibilidad. Vive la ilimitada gama de opciones que te ofrece cada segundo, ahí es en donde está la felicidad, en el sentimiento (por pequeño que sea) que sientes en este momento, al conectarte con el universo. Es ahí en donde encontrarás esa fuerza que buscas, ese impulso que deseas, esa ilimitada fuente de movimiento que anhelas.
Al buen A., que me escribió desde tierras que añoro en la capital cultural del mundo viejo-viejo (es doble viejo) le digo GRACIAS. Hoy nos quedamos con los pensamientos en la cabeza. Se me preguntó hoy qué es algo que no me guste. Después de horas de pensar contesto: que no digan cuando están en contra de algo y que sucumban al temor de preguntar lo que les mueve.
Tienes absoluta razón A. y reitero mi continuo cambio de opinión. Así es mis estimados, estaba yo errado al decir bueno sacar problemas relacionados con el tabaquismo del seguro social de salud mexicano en la entrada gracias por fumar. A bien se me recordó que ninguna enfermedad tiene una causa absoluta y por ende, sería un crimen desterrar del sistema de salud a los chilangos con enfisema pulmonar. ¿Qué pasa con todos aquellos que por azares del destino contraen la enfermedad sin haber jamás probado un cigarro? Así es querides, en la amada Chilangolandia con altos niveles contaminantes en el aire, no podemos asegurar nada. Ni en ningún lugar del planeta, para esas andanzas. Además, el compañero a bien me sugiere implementar mejor sistemas de mayores impuestos a dicha droga legal; en hora buena, ideas, ideas, ideas…
Gracias lectores y aficionadas. Me fascina la idea de recibir comentarios hablados, escritos y pensados. Me gusta que me detengan en el café acostumbrado y me digan qué les provoca cierto pensamiento recurrente en mi discurso. Me interesa que me lleguen correos e que me permitan cambiar de opinión o generen nuevas preguntas. No se detengan estimados y recuerden: ¡Los tira-pilas funcionan! No se hagan del rogar y utilícenlos…
Tira pilas
Del servicio social como exaltación del humano y ¿qué rollo con México?

La idea es discutir desde perspectiva joven temas como: liderazgo, sexualidad, economía, política, ecología, creatividad y valores. Al respecto me quedan diversos pensamientos para el día de hoy y me gustaría compartirlos con ustedes, mis estimados aficionados.
¿Por qué hay apatía entre la juventud?
Se supone que este es un tema que yo debería manejar con fluidez, sin embargo el caso no es tal. Tengo algunas ideas al respecto y opiniones, como todos, pero tengo que admitir mi estulticia general en lo relacionado. No tengo la academia suficiente para abordarlo teóricamente y mi práctica se limita a la observación y comprensión de mi propia experiencia.
Hace algunas semanas me entrevistaron en Acustica223.com y me hicieron la pregunta que parece ser la más relevante cuando hablamos de la juventud mexicana: ¿por qué la falta de interés y movimiento? Mi respuesta fue y continúa siendo que no hay una “falta de movimiento”, mas debemos cambiar nuestra óptica si deseamos entender y leer en el lenguaje en el que éste se expresa. Así pues, el movimiento juvenil se encuentra hoy privatizado, globalizado y en una dinámica de mercado, como todo lo demás en nuestro mundo.
En cuanto a la apatía, si lo que deseamos es comprenderla, debemos primero hablar del trabajo y su mercado. Recordemos que hoy día 8 de cada 10 egresados universitarios en México no trabajan en su área de estudio. Entonces pues, ¿cuál es el propósito de estudiar? El discurso foxista siempre fue el de “jóvenes emprendedores”, pues claro, el gobierno no tiene la capacidad de ofrecer empleos a todos ellos. Además, las empresas privadas no desean gente sin experiencia y definitivamente tampoco pueden emplear al grueso de la juventud que hoy llega tocando a sus puertas.
Es así que la apatía se manifiesta entre jóvenes mexicanos. Una forma de rebelión y de contracultura al sistema que desde inicio lo ha rechazado. Un repele al mundo adulto que no le permite estudiar lo que él desea, pues de eso no hay demanda o está sobre ofertado. La actitud responsiva y consecuente es comprensible, no por ello admisible y aceptable.
Pienso en mi pequeña hermana que actúa en consecuencia de lo que uno le hace o le dice. Por ejemplo, si uno llega y le saca la lengua, su primera responsiva es sacarte la lengua de regreso. Algo similar es lo que sucede entre el mundo adulto y los jóvenes. El gobierno, los medios de comunicación, las empresas privadas y la sociedad nos impusieron un protocolo de inicio. Nos presentaron las reglas del juego y nos dijeron cómo vestirnos, cómo actuar, cómo hablar, en lo que trabajar, lo que estudiar. Sin embargo, algo falló pues el día en el que el grueso de la población joven lo intentó llevar a cabo, no hubo universidades, no hubo demande de trabajo, no hubo interés común y se dejó de hablar el mismo lenguaje.
Todo lo anterior es una pequeña y sencilla explicación, un poco escueta dicho sea de paso, de lo que es la contracultura y lo que ocasionó en un inicio la apatía. Ahora bien, ¿qué podemos hacer para ir rompiendo con dicho ciclo vicioso?
El budismo tibetano habla de que una vez que uno tiene la calidad de vida de un ser humano, es indispensable que se actúe en consecuencia y se devuelva algo a la sociedad. Es entonces que el servicio social enaltece al ser mismo y le da la oportunidad de aprender y enseñar la experiencia acumulada a lo largo de sus distintas reencarnaciones.
En el sentido práctico, el servicio social debería de re-significar la mayoría de las actividades diarias en el sistema, con el objeto de romper con las desgracias que éste acarrea y el salvajismo puro del capitalismo. Turismo social, ecología social, educación social, comercio justo entre otros me parecen vías alternas y responsables de avanzar en conjunto. A los jóvenes, esto ofrece la oportunidad de aprendizaje tanto anhelado por las empresas privadas y habla de la iniciativa misma de dicho sector de la población para la acción.
En diversos eventos y programas que hemos organizado desde el grupo de acción que hemos venido conformando desde hace año y medio, siempre termino sorprendiéndome con la efectiva respuesta que obtenemos por parte de la juventud. Es entonces que me doy cuenta de que la juventud no es “apática”, está simplemente reacia a que se le tome en cuenta, a que se le integre, a que se le escuche y a que se le deje ser y actuar.
La juventud mexicana, que hoy representa un tercio de la población total del país, debe exigir se le devuelva un papel en el espacio público, en la política, en la economía y en todos los campos inherentes a cualquier otro sector de la población. No sólo debemos crear nuestros propios espacios, sino que debemos replantear nuestro rol en los ya existentes.
* Este arítculo se relaciona con De.
Carta a Directora Editorial
Estimada Lidya Ramos,
No soy un lector regular de American Health & Fitness pero de casualidad compré el número 48, de mayo de este año y me encontré con algunos errores que pensé pertinente comentar.
En tu carta editorial me parece importante rescatar que una urbe, del latín urbs es una ciudad, especialmente populosa, por lo que decir “la gran urbe de la ciudad” es un pleonasmo. Además, un “periodo” según la Real Academia Española es el “espacio de tiempo que incluye toda la duración de algo”, por lo que decir un “periodo de tiempo”, como se hace en la página 12 en la sección Consultorio Sexual, es reiterativo.
Después, en la página 34, en la respuesta número cuatro, me gustaría recordar al autor del artículo que no existen las “razas humanas”. Podemos hablar de la raza humana, pero no de distintas razas y menos basado en el color de piel de una persona. En algunos idiomas como el alemán, la palabra “raza” ha ya desaparecido del vocabulario, dados los estragos en el consciente colectivo que tuvo la segunda guerra mundial. Valdría la pena eliminar rasgos racistas de publicaciones populares.
También, en la sección de Sexo, de la A a la Z, convendría urgir a los autores de dicho tipo de artículos en las revistas y demás material impreso a fomentar el uso del condón, no a sugerirlo como se hace bajo la definición de dicha palabra.
En general me creé una idea de falta de cuidado en la redacción e imprecisión en el uso de la lengua a lo largo de la edición, pues estos errores no fueron únicos. Por ello, pienso que convendría a la revista contratar un editor de contenidos para evitar dichos errores o en su caso, revisar el trabajo de quien lleve a cabo la tarea actualmente.
Es probable que ésta sea una de las razones por las cuales no acostumbro leer revistas del género. Sin embargo, considero de vital importancia que dicho tipo de detalles se cuiden al máximo con el ideal de verdaderamente comunicar información válida, objetiva e importante a los que sí leen dichas revistas. Después de todo, ese es el papel de los medios de comunicación.
AB
A single traveller's story
Je voudrais aller en France, encore; Je la manque beaucoup.
De la filosofía existencialista hecha poema
En donde más tiempo pasa el autor es en Venecia, una ciudad en la que sólo he estado una vez; ahora dos, con el recorrido en el tiempo y en el espacio de S., de quien fui cómplice en fechorías por un tiempo, extasiado.
Sugiero que lo lean en lugar de que yo les revele algunos de los misterios de anotaciones y raciocinios del francés, pero para que retome un poco de sentido el título de la entrada les adelanto que los fragmentos de ideas y pensamientos son verdaderas muestras del potencial literario; descripciones detalladas que nos adentran en personajes efímeros y sin importancia alguna. Falta de diálogo pues la escena nos lo dice todo y además, por si fuera poco, nos da guía privada por salas de museos por toda la ciudad ahogada con lugar exclusivo para admirar telares inmensos (los más grandes que hasta entonces se habían hecho) y la primera fila en un concierto sin precedentes. ¡Lean, que el verano está aquí!
* Este arítculo se relaciona con De.
De
Algunos de estos temas son:
- De la aldea global y más del calentamiento global
- Del nivel de consciencia de la población mundial
- Del cómo influye la educación en la adquisición de consciencia regional y cívica
- Del quehacer de las organizaciones no gubernamentales y de sus límites
- Del cómo se ve el mar desde un cuento inventado (o desde mi realidad)
- De la filosofía existencialista hecha poema
- Del campo mexicano y sus limitantes
- Del regionalismo mexicano con proyecciones potenciales
- Del servicio social como exaltación del humano
- De Personajes sin utilizar