Solo como perro de azotea

Hoy desperté con un tango sonando en la cabeza. Tenía que jugar con el nuevo aparato y encontré entre tantos canales televisivos que se nos ofrecen hoy en día un canal de tangos. Parecía que temblaba y tenía un mal sabor de boca. La vida me sabe a que he sido engañado, a que estoy desafinado. No mintamos pues... Me asomé por la ventana a observar el amanecer. Me quedé estático, paralizado y pensativo. Me encontré con que después de tanto, estoy tan solo como el perro de la azotea de enfrente. Él a veces se duerme, a veces se asoma también por la azotea y piensa, algunas otras simplemente se aburre y otras tantas gasta su energía en correr en círculos por el pequeño patio que se le destina. Y el sol sale y el perro se calienta con la luz, con su calor. Yo cerré la ventana y huí camino hacia la libertad, una libertad sin más solitaria.

2 comments:

Anonymous said...

I hope that you can find soon that part of the puzzle of your heart that is missing...so you can feel completly satisfied...I really undertand you, 'cause once I felt like this...but then I found that Missing Part...it's interesting to note that every person has to find that part, and is even more curios to know that this part has the same shape in every person..so the "hole" in everyone's heart has the same shape...So, to conclude, if you need some help or comfort you can trust in me..I never reveal secrets...jaja...and I've found that piece...cheers!!!

AB said...

Danke...

Aquellos que cederían la libertad esencial para adquirir una pequeña seguridad temporal, no merecen ni libertad ni seguridad.
Benjamin Franklin